"Planes and trains and boats and buses characteristically evoke a common attitude of blue, unless you have a suitcase and a ticket and a passport and the cargo that they're carrying is you". (Tom Waits. Foreign Affair)

lunes, 13 de febrero de 2012

Aquí unos amigos


De izquierda a derecha, obviando al señor mayor que está en primer plano:

David
Un poco más sobre David. El otro día, aprovechando que, como de costumbre, no había clientes en su bar-restaurante, el Monkey Box, me estuvo enseñando algunas fotos del trabajo que lleva a cabo con su fundación. Cómo construyen escuelas en Laos y en aldeas casi inaccesibles de las montañas tailandesas, cómo les enseñan a instalar sus propios retretes o un rudimentario sistema de agua corriente... También me enseñó otras imágenes: un par de veces al mes David y su gente cruzan ilegalmente la frontera con Birmania, acompañados por soldados karenni armados hasta los dientes, para llevar medicinas y víveres a las aldeas que siguen siendo machacadas por el ejército de Myanmar. "¿Y si os pillan?". Sonríe, se pasa rápidamente el pulgar por el cuello y se va a toda prisa a atender a unos franceses que acaban de llegar, no sea que se escapen. También es policía voluntario aquí, en Mae Hong Son. Si un farang tiene un accidente de moto o se ve envuelto en algún problema, su teléfono suena y se pone "al servicio de la comunidad". Sí, le va el mambo. Y creo que no conozco a nadie con quien tenga menos que ver ideológicamente. A su lado George Bush es Salvador Allende. Sin embargo, es un buen tipo. Su hospitalidad no parece tener límites. Sus consejos sobre las rutas por los alrededores de Mae Hong Son valen su peso en oro. Y gracias a él he podido entrar en contacto con algunos de los habitantes tailandeses de esta ciudad, que ya me saludan por mi nombre cuando se cruzan conmigo por la calle, y compartir con ellos unas cervezas o unas garras de pollo (baby fingers, como las hemos rebautizado) en bares y casas de comidas fuera del alcance del farang medio. Cuando esto ocurre, invariablemente nos lanza un guiño cómplice y susurra: "Esto no sale en la Lonely Planet".

Thomas y Magalie
Él es economista y contable. Ella, profesora de primaria. Ambos son belgas y han dejado sus trabajos en el lado de allá para dar la vuelta al mundo en siete u ocho meses. Después de un mes en China le están dedicando unas semanas a Tailandia. La semana que viene llegarán a Laos y harán el mismo viaje que hice yo el año pasado, bajando el Mekong en barco desde Huay Xai hasta Luang Prabang, con noche (inquieta, sin duda) en la asilvestrada Pakbeng. Y más adelante les esperan Camboya, parte de Indonesia, Australia, donde sólo pararán en Sidney para coger un avión a Perú, y después quizá Venezuela, quizá México... Thomas, cuya curiosidad es casi enfermiza, es el único que está sacando algún provecho de las clases improvisadas de thai que nos imparte Oom, una de las camareras de David, después de cerrar o cuando, como de costumbre, no hay clientes en el Monkey Box. Magalie se da por satisfecha con haber superado la prueba de los baby fingers. Hemos pasado buena parte de los últimos días juntos, intercambiando consejos de ruta, contándonos nuestras vidas y compartiendo nuestra pasión por Mae Hong Son. Ellos se han marchado esta mañana, a regañadientes, porque no disponen de mucho tiempo antes de llegar a Laos. Yo sigo resistiéndome a irme de aquí. Quizá volvamos a encontrarnos dentro de uno o dos meses en algún punto del camino. Quién sabe.

Uud
Uud es uno de los mejores amigos de David, entre otras cosas porque trabaja en uno de los bancos locales y nunca le niega un préstamo cuando, como de costumbre, no hay clientes en el Monkey Box y las cuentas se le descuadran. Más allá de su actividad profesional, Uud parece haber consagrado su vida a averiguar cómo se dice la palabra "coño" en todos los idiomas del planeta. Y, en la medida de lo posible, a estar cerca de uno –o varios– ejemplares de este órgano tan cotizado. El interés de Uud por los coños es tan conmovedor como internacional. ¿Le gustaría a Uud pasarse por Bélgica en algún momento de su vida futura?, pregunta Thomas, agradecido por su hospitalidad y su perpetuo buen humor. Por supuesto, responde Uud, siempre y cuando disponga de una buena provisión de coños a su alcance. Si bien, puntualiza, su naturaleza le hace inclinarse preferentemente por el coño hispano. ¿Qué me dices, Raúl, podrías conseguirme unos cuantos?

Y así es como, poco a poco, van pasando los días y sus noches...

baby fingers

2 comentarios:

  1. ¿Ya le has explicado a Uud que existe un pequeño poblado en España que rima como coño donde todo mundo bebe Rioja? (Teri)

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    1. Pues no, pero se lo digo la próxima vez que esté con él. Eso sí, en el caso de que se entusiasme demasiado y quiera quedarse a vivir en tu casa te advierto que lo único que bebe es whisky con soda.

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